sábado, 14 de mayo de 2016

El arte no es la historia del arte

El arte no es la historia del arte porque lo que ya está hecho no puede comunicar toda su intensidad. El arte tiene como función ampliar o cambiar las conciencias y cada tiempo tiene su propio arte. Y para una persona que vea por primera vez una obra pasada tampoco es arte ya que lo conmovedor del arte pasado ya lo lleva dentro aunque no lo conozca, es decir esa persona ya está constituida por esa experiencia humana pasada. Por tanto, una cosa es el arte y otra su historia.

El arte es lo desconocido y comunica toda su fuerza en el presente, cuando se produce ese bendito estado en el ser humano, porque es cuando toma significado verdadero, es cuando sirve para cambiar, ampliar las conciencias o borrarlas y contribuir a otros estados de conciencia más reales, si cabe. Es imposible que el arte pasado cumpla su función como tal, simplemente sirve como información que en muchas ocasiones impide percibir el arte de ahora, que es lo que verdaderamente importa.

La esencia del arte no es el producto o el concepto derivado de él, el arte toma plena potencia dentro del individuo y ese mismo estado es arte sin necesidad de expresión de ningún tipo. Digamos que el resultado, que es la obra, es el residuo del arte. Por eso la obra del artista de hoy, el artista de vanguardia, es él mismo con todas sus consecuencias.

No es suficiente hoy que el arte se conciba como una virtud o una cualidad o un don -una parte- del individuo. El arte es la totalidad del individuo, lo determina por completo, por tanto, el arte ha de actuar en la misma psique del artista. Y es ahí donde está su lienzo de trabajo. El resultado no se sabe, lo que sí puedo deciros es que con su propia existencia ya va a cumplir con la función de artista, si verdaderamente lo es, ya que allí donde esté y en las circunstancias en que esté su impronta contribuirá a que el ser humano vea la realidad actual de su propia vida y del mundo, o cuando menos perciba lo falso, lo que no es útil, lo que no es belleza.



No hay comentarios:

Publicar un comentario